Concluyó sin resultados la búsqueda del cuerpo en el arroyo Imboa

No obstante es meritorio destacar el accionar de los efectivos de las fuerzas federales de nuestro país (GN), que dieron cumplimiento a órdenes de la justicia nacional y con la anuencia de autoridades brasileras.
Todo comenzó cuando un testigo reservado apuntó que en ese tramo de agua, en la desembocadura del rió Uruguay, que fue arrojado el cuerpo del desaparecido joven correntino Christian SCHAERER, secuestrado hace más de 15 años.
El testigo citó que en el lugar se encontrarían con una bolsa y una pala, cosa que sucedió, sin embargo el total desagote del lecho del arroyo y los trabajos de inspección del lustre no arrojó el anhelado saldo, los vestigios del cuerpo del joven.
Hasta el lugar, llegaron alrededor de 35 gendarmes, más Antropólogos, geólogos licenciados en Criminalística y Auxiliares. Además de filmadores y fotógrafos, quienes filmaron todas las actividades.
Todo esto con la colaboración de autoridades policiales de Brasil y el consulado argentino en el país vecino. Los gendarmes están desde el 28 de diciembre y se intensificó a partir del 2 de enero, cuando las condiciones de movilidad dentro del lecho del arroyo lo permitió, el mismo desemboca en Río Uruguay.
Se revisó cada centímetro de la parte central del lecho del Arroyo, y todas las actividades se realizaron manualmente. Los investigadores se desplazaron en plataformas móviles, donde no podían caminar por profundidad.
Para la única actividad que utilizaron herramientas, fue para desagote del arroyo, que abarcó casi 100 m largo entre terraplenes y de 30 m de ancho. Para finalizar, la zona debe quedar como estaba, tanto en lo que respecta al bosque y la corriente de agua.